Acá hay un recuento de los posts y los episodios de este trabajo. El primer post, titulado General, consta de cinco posts y temas: Resumen del trabajo; Alcanzando los tres fines; Las artes resumidas; La vida del caballero; y El Trabajo de Asistentes y Mensajeros.
Esta última meta no disfrutaba de aprobación entre los sivaitas ortodoxos porque el apego y la complacencia que ella generaba por sus beneficios temporales impedía al Sadhaka mejorar en el camino de la genuina liberación.
Tratándose del sexo, nos gustan los preliminares. Eso no significa que no haya encuentros sexuales más cortos y otros más largos, mas en lo posible nos agrada que se entretengan en alguna de las muchas zonas erógenas de nuestro cuerpo ya antes de comenzar la penetración.
Tú como mujer, que vives en una cultura diferente a la de la India o bien la Afgana, en donde a el blog gracias si estás en tu derecho a expresar y a convertir lo que no te hace feliz, ¿por qué razón admites maltrato, humillación, abuso, agresión por de tu pareja? ¿Hasta en qué momento prosigues dándole tu poder?
En verdad, cuando una Tb empiece a ofrecerte detalles sobre de qué forma es, y a darte explicaciones de su vida con pelos y señales sin que tú se lo hayas preguntado, puedes tomarlo como un claro IDI a favor tuyo. Probablemente, se está cualificando.
Omega3 ácidos grasos. Los ácidos grasos omega3 pueden calmar los cólicos menstruales al ayudar a su cuerpo a generar prostaglandinas más amigables que reducen el dolor y la inflamación. Se hallan en el aceite de pescado, aceite de lino y nueces.
No hay peor guerra civil que la que uno sostiene contra sí mismo. Afirmaba Gide que hay poquísimos monstruos que se merezcan el miedo que les tenemos. Uno de esos monstruos a los que, quizás, sí debamos temer es el temor a dejar de ser lo que creemos que somos; los otros, en ocasiones, gobiernan naciones.
Su salud y seguridad personal son requisitos previos para el placer sexual y si decide que tener más de una pareja es una cosa que gozaría, recuerde que nadie es sencillamente un cuerpo, ni usted, su pareja ni sus posibles amantes.
Por último, puede resultar muy erótico agregar un toque de violencia al acto erótico para, rompiendo esas medias que la mujer debe llevar puestas al iniciar dicho acto sexual, dejar al aire esas unas partes de la anatomía femenina a la que el hombre desea acceder.
En España se ha producido un enorme avance en este sentido. Hemos pasado de hacer el amor con la luz apagada y el camisón puesto, a hacerlo con la luz encendida; y de la tradicional postura del misionero a la de la mujer encima, para supervisar, dirigir y exigir un placer genital.
